martes, 30 de julio de 2013

La lupa sobre los JJOO de Londres 2012


Ayer, 28 de julio, se cumplió un año del comienzo de los últimos Juegos Olímpicos que se desarrollaron en la capital inglesa de Londres. A continuación llevaremos a cabo un análisis de todo lo sucedido entre julio y agosto del 2012, subrayando a los atletas que se destacaron y por supuesto a la delegación argentina. También han quedado muchas curiosidades para recordar y por último no podemos dejar de lado a las jóvenes promesas, que además de prometer a futuro ya forman parte del presente con su desempeño.
  
Michael Phelps se convirtió en el deportista más ganador de estos Juegos Olímpicos y es el atleta que más medallas sumó en la historia olímpica. Con cuatro oros y dos segundos puestos en Londres 2012, superó el récord de la ucraniana Larissa Latynina que acumulaba 18 metales entre Melbourne 1956, Roma 1960 y Tokyo 1964. Con 22 medallas en total (18 de oro, 2 de plata y 2 de bronce), su registro parece insuperable. Como si fuera poco tiene el récord de más medallas obtenidas en un mismo evento con 8. En los 200 metros mariposa el “Tiburón de Baltimore” perdió por un mínimo margen de 5 milésimas ante el joven sudafricano Chad Le Clos y en 400 metros combinados no pudo ingresar al podio. Acumuló su primera dorada en los 4x100 y luego los 4x200 metros libres de carreras por equipos. Ya se había destacado en Beijing 2008 durante los 100 y 200 metros mariposa, además de los 200 metros libre, o los 200 y 400 metros cuatro estilos. Ha logrado marcar 37 récords mundiales y es el único competidor que obtuvo en dos Juegos consecutivos 8 medallas.

Oscar Pistorius fue la nota más interesante que surgió en Inglaterra, con su increíble historia de vida, válida de orgullo y sacrificio. Por primera vez en los Juegos Olímpicos un atleta discapacitado compitió en atletismo. El sudafricano logró clasificar a las semifinales con sus dos prótesis de carbono, ya que a los 11 años sufrió la amputación de sus dos piernas por una malformación congénita. La ovación y emoción entre todos los presentes fue incontenible.


En Tiro Masculino la medalla dorada fue para Al-Attiyah, quien había sido campéon en el Rally Dakar de Argentina - Chile y pasó a quedarse con la medalla de bronce en la disciplina tiro skeet, con 144 aciertos. Dentro de esa misma categoría sorprendió a todos el surcoreano Dong Hyun. Un hombre casi ciego que tiene el 10% de visión en el ojo izquierdo y el 20% en el derecho. Marcó 699 puntos y obtuvo la medalla dorada individual además de la grupal (récord mundial en ambos casos).

Pero en 2012, la figura indiscutida fue el jamaiquino Usain Bolt. El velocista tuvo seis pruebas olímpicas donde logró seis medallas de oro, con cuatro récords mundiales y uno olímpico. Además, es el primer hombre de la historia que defiende exitosamente los títulos de los 100, 200 y posta 4x100 metros de manera consecutiva. Tiene una personalidad cautivante, y es sin duda un showman imperdible. Jamás podrá ser discutido como el mejor velocista de todos los tiempos, tal cual él lo pidió, ya se ha convertido en una leyenda. Con el oro conseguido en los 100 metros llanos, marcó el nuevo récord olímpico con 9 segundos y 63 milésimas. Así es, estamos hablando de la persona más rápida del planeta tierra.


Roger Federer (el número 1 del mundo por aquél entonces) se quedó con la medalla de plata tras obtener un triunfo increíble ante Juan Martin Del Potro en la semifinal. Ambos tenistas disputaron el partido más largo en la historia de los Juegos Olímpicos: 4 horas y 26 minutos, para que finalmente el suizo selle el partido con un 3-6, 7-6 y 19-17 en el tercer set. Posteriormente, en la final, el local Andy Murray lograría por primera vez en la historia de Gran Bretaña la medalla dorada en Wimbledon. 


Tras el duro golpe anímico y la dolorosa caída en semis, la “Torre de Tandil” se repuso y venció al serbio Novak Djokovic. Esta vez, Del Potro pudo superar sin problemas al líder del ranking ATP para obtener la medalla de bronce, que se convirtió en la primera medalla que ganaría el país en Londres 2012. El gran nivel del tandilense no dejó duda alguna sobre el excelente momento que atravesaba el tenista entrenado por Franco Davin en ese momento. Para acceder a la lucha por el podio, el tandilense dejó en el camino al japonés Kei Nishikori, al francés Gilles Simón, al italiano Andreas Seppi y al croata Ivan Dodig. A su vez, Juan Martín se convirtió en el primer argentino singlista que puede subir al podio, ya que los únicos dos hombres que trajeron el bronce como pareja doblista fueron Javier Frana y Christian Miniussi, en Barcelona 1992. El bronce no solo le permitió acceder a lo más alto del tenis olímpico, sino también mejorar su ranking ATP para ocupar el octavo puesto.


Argentina no tuvo muy buenas participaciones en su delegación, y salvo algunas excepciones, los resultados no estuvieron a la altura de las expectativas en general. A pesar de ello hubo sorpresas gratas también. Los deportistas de nuestro país solamente cosecharon 4 medallas (una de oro, otra de plata y dos de bronce). El país culminó en el puesto 42 de la tabla general. Suena una posición muy lejos, pero el balance le permite ingresar dentro de las mejores diez actuaciones argentinas en la historia de este evento.

El resultado más resonante fue sin duda el del correntino Sebastián Crismanich, que alcanzó la medalla de oro. No solo fue la primera medalla para el taekwondo en Argentina, sino también la única que obtuvo la delegación nacional en el Viejo Continente. En el camino por el título en la categoría de 80 kilos, debió superar al neozelandés Vaughn Scott, al afgano Nesar Ahmad Bahawi, al armenio Arman Yeremyan, y en la ajustada final al español Nicolás García Hemme. Hace 64 años (desde Londres 1948) que nuestro país no obtenía una medalla dorada a nivel individual. Como premio al anecdótico triunfo de Crismanich, el jugador de básquet Luis Scola (que había sido designado como portador del estandarte) le cedió la bandera para la ceremonia de cierre.

Las Leonas, siempre candidatas, no decepcionaron y por cuarto Juego consecutivo lograron nuevamente una medalla. El liderazgo lo marcó la mejor jugadora del mundo, Luciana Aymar como principal figura del hockey y abanderada argentina en la ceremonia de apertura. En la final del certamen no pudieron ante el gran equipo de Holanda, potencia mundial, consiguiendo así la medalla de plata. Fue la segunda premiación de ese tipo, la primera en Sydney 2000, dado que las dos siguientes Olimpíadas dejaron como saldo de la gran campaña una medalla de bronce. Solo falta la dorada, algo que es cuestión de tiempo y llegará pronto si siguen haciendo las cosas de manera notable, manteniendo la base de jugadoras tan talentosas como aguerridas.


El último galardón para Argentina se lo llevó la pareja de Juan de la Fuente y Lucas Calabrese en la regata de Vela, clase 470. Otro año positivo para esta disciplina que ya acumula 9 medallas en toda su historia de Juegos Olímpicos. Es la segunda con más metales, solamente superada por las 24 que posee el boxeo. Durante las primeras 10 regatas la dupla argentina logró la tercera posición en la tabla general. Finalmente en la “Medal Race”, donde corren los mejores 10 equipos clasificados y se otorga el doble de puntos, mantuvieron ese puesto para lograr la medalla de bronce con 63 puntos acumulados. De la Fuente repitió la misma actuación que en Sydney 2000 cuando hacía dupla junto a Javier Conte.

Las grandes diferencias con las potencias mundiales del deporte son muy claras, y tanto el entrenamiento como el apoyo económico suelen definir lo que es un atleta completamente profesional de otro casi amateur. De todas maneras algunos lograron destacarse y forman parte del orgullo nacional al representar a nuestro país con sacrificio colectivo sumado a virtudes individuales. Los 10 diplomas que se lograron solamente fueron superados en dos ocasiones, Londres 1948 y Helsinki 1952, con 15 y 14 certificados en papel respectivamente.

Federico Molinari se convirtió en el primer argentino en la historia que consigue ingresar a una final de gimnasia artística en Juegos Olímpicos. Tras haber clasificado séptimo, finalizó en la octava posición en la final de la disciplina de anillas y se llevó un diploma olímpico. Tuvo una mala ejecución en la salida final de su performance, donde el rosarino admitió haber arriesgado de más al elegir una rutina complicada para pelear por subir al podio.

En lanzamiento de bala, Germán Lauro superó el récord nacional (que antes había impuesto él mismo) y culminó sexto en la final de los mejores competidores. En el Olympic Stadium, su mejor marca fue de 20 metros 84 centímetros. Antes el oriundo de Trenque Lauquen había clasificado quinto para pasar a ser el segundo en recibir un diploma olímpico y el primero en llegar a la máxima instancia del lanzamiento de bala.

En remo doble par, Ariel Suárez y Cristian Rosso estuvieron muy cerca de subir al podio pero se les escapó en el final, por solo dos segundos. Sin embargo lograron un diploma tras finalizar cuartos. Con la misma suerte corrió el seleccionado argentino de básquet, cuarto puesto y diploma con un sabor amargo. En las semifinales no pudieron ante el inmenso "Dream Team" de Estados Unidos y en el partido por el tercer puesto la “Generación Dorada”, que aún conservaba algunas figuras,  cayó ante un sorpresivo equipo de Rusia que le arrebató la medalla de bronce a los dirigidos por Julio Lamas.

Hay que ser realistas y saber que a nivel olímpico nuestro país tiene un constante desafío mayor que muchos otros. Por cuestiones de preparación, infraestructura, plata, cantidad de deportistas e historia, siempre fue así. Los proyectos a largo plazo merecen tiempo, paciencia y luego se podrá analizar si son efectivos o no. Con mucho trabajo, apoyo financiero, humildad y autocrítica se podrá mejorar la performance de cara a los próximos Juegos de Río 2016. De eso no caben dudas, potencial hay y no hay que desaprovecharlo.

Decirlo en otra época hubiera sido una obviedad, pero desde que la Argentina hizo que el Dream Team dejara de ser imbatible, las cosas cambiaron mucho. Sin embargo, hay un jugador que lleva 26 triunfos consecutivos en partidos oficiales y nunca perdió un partido con el seleccionado de los Estados Unidos. Es Kobe Bryant, que aquí logró su segundo oro. Otro que cerró un año perfecto fue su compatriota Lebron James, que consiguió su primer anillo de la NBA con Miami y el segundo consecutivo, además de la obtención de su segundo metal olímpico (ya tenía la medalla de bronce de Atenas 2004). 

De todos modos, la gran figura del equipo fue el inmenso Kevin Durant (de Oklahoma City Thunder), con una increíble eficacia en tiros de tres puntos y 30 puntos anotados en la final ante España. En semifinales los estadounidenses superaron por 109 a 83 a la “Generación Dorada” de Argentina. Antes habían despachado a Australia y en la zona de grupos vencieron a Francia, Argentina, Lituania, Túnez y Nigeria para lograr mantener el invicto a lo largo de toda la competición. En básquet los estadounidenses ya acumulan 14 medallas de oro. En esta ocasión el Dream Team, dirigido por Mike Kryzewski, volvió a llevarse todos los elogios con un juego vistoso y aplastante.

El joven Erick Barrondo (22 años) se convirtió en el primer deportista de Guatemala que suma una medalla para su país. Fue de plata, pero el valor real será imposible de determinar por ser el debutante guatemalteco en el medallero de atletismo. Logró la hazaña en marcha atlética, habiendo conseguido el oro en los Juegos Panamericanos del año anterior en Guadalajara. Sin duda es un gran comienzo para el nacido en Verapaz que además de ser un ídolo en su país natal, ya es un serio candidato en todas las competiciones de marcha.


La tabla del medallero general dejó como líder a Estados Unidos, que con 46 medallas doradas de un total de 104, le ganó la pulseada a la otra superpotencia de China. Los asiáticos sumaron 88 metales (38 oros) no pudieron repetir el primer puesto de Beijing 2008 y perdieron el mano a mano habitual. Rusia con 82 medallas (24 de oro), no pudo repetir el cuarto puesto y fue superado por los locales. Gran Bretaña logró dar el batacazo con 29 oros. Sin embargo los británicos tuvieron en total menos medallas que los rusos (65 contra 82). El anfitrión sonrió y estuvo a la altura de las enormes expectativas que se habían generado.

A la hora de nombrar las curiosidades no podemos dejar de lado a los que se portan mal, pero tampoco a los que son un ejemplo de vida. Con la lucha propia, y superando adversidades, muchos dan la ejemplar lección de seguir a pesar de todo. ¿Qué mejor situación para hacerlo que frente a millones de televidentes de todo el mundo? En la competición de Tiro, más precisamente 100 metros con carabina, la malaya Nur Suryani Mohamad participó a pesar de tener 8 meses de embarazo, cercana al parto de su hijo.

Cuatros parejas (una de Corea del Sur, dos de China y una de Indonesia) fueron descalificadas por especular y dejarse perder deliberadamente en Badminton, para así poder tener un mejor cruce en los cuartos de final. El Comité Olímpico Internacional rechazó el pedido de las competidoras para apelar el fallo y todas debieron culminar su competición además de recibir una suspensión por conducta antideportiva. Esto se produjo en la clasificación del dobles femenino, donde las jugadoras buscaban tener un fixture más accesible. En el clásico y obligatorio doping, hubo bastantes sancionados que no pasaron los exámenes médicos previos o posteriores a competir. Se ha tornado cada día más habitual en el alto rendimiento y con controles más estrictos y rigurosos para los atletas de elite. El primer descalificado fue el yudoca estadounidense Nicolas Delpopolo, que terminó séptimo y posteriormente en la prueba de orina se le descubrió cannabis, resultando que había consumido marihuana.

En toda la historia de los Juegos Olímpicos, miles de récords han sido quebrados con el pasar de los años. El ser humano continúa superándose a medida que el tiempo pasa, mejorando las marcas registradas en cada disciplina. Londres 2012 no fue la excepción. Quizás lo más sorprendente en la actualidad es la juventud de aquellos atletas, muchos adolescentes, que cumplen logros impensados al menos para el comienzo de su carrera. Hay una clara tendencia a fomentar la rápida inserción en la competencia de los atletas que recién ingresan en la elite. Muchos casos, debutantes a corta edad, consiguieron la proeza de alcanzar un galardón dorado.


La lituana Rūta Meilutytė especialista en pruebas de braza de natación, acudió a su primer Juego Olímpico en Londres 2012, y con 15 años ganó la medalla de oro en los 100 metros. Para todos aquellos que presenciamos la premiación en vivo, fue imposible no emocionarse con el llanto desconsolado de la joven que no podía creer lo que había realizado minutos antes. La estadounidense Gabrielle Douglas, que cumplió 16 hace unos meses, se convirtió en la primera competidora de raza negra en obtener la medalla dorada en gimnasia artística, más precisamente en all-around individual. La medalla de plata fue para Viktoria Komova, de Rusia, que quedó unas centésimas atrás. La rusa tiene un año más que la gimnasta ganadora y fue 3 veces campeona olímpica de la Juventud.

En la disciplina de natación, la norteamericana Missy Franklin, obtuvo la medalla dorada a los 17 años y marcó un nuevo récord mundial tanto en 200 metros espalda como en 4x100 medley. Luego, su compatriota Katie Ledecky, con tan sólo 15 años de edad, se quedó con la medalla de oro en 800 metros libres de la natación femenina. Entre los hombres, el japonés Kosuke (de 17 años) obtuvo la medalla de bronce en 400 metros de combinado individual. A su vez, con sus notables tiempos el nipón marcó un nuevo récord asiático. El caso más resonante y polémico fue el de la china Ye Shiwen. Por sus 16 años, fue muy cuestionada y la investigaron por un posible doping ya que no solo consiguió el primer puesto en 400 metros de cuatro estilos, marcando el nuevo récord mundial, sino que también superó a todos los hombres en esa disciplina.

En la historia de todos los Juegos Olímpicos, Marjorie Gestring fue la más joven de todos los atletas en ganar una medalla. Lo hizo con 13 años y se quedó con el oro en trampolín, durante los Juegos de Berlín 1936. Parece difícil que alguien pueda superarla, nos resulta imposible pensarlo, pero el tiempo dirá si aparece una nueva generación. Como contraste, el atleta más veterano de los Juegos Olímpicos de Londres 2012 fue el japonés Hiroshi Hoketsu. El hombre tiene 71 años y compitió en equitación. Su primera participación olímpica fue en su ciudad natal, Tokyo, durante los juegos de 1964. De todas maneras, el récord por ser el competidor con mayor edad lo tiene el sueco Oscar Swahn. Compitió con un año más que Hoketsu y logró, en la disciplina de tiro, la medalla plateada en los Juegos Olímpicos de Amberes 1920. Su caso es completamente distinto a los inexpertos atletas que recién comienzan. Pero a su vez corre con más desventaja ya que ingresó en la vejez y su estado físico no es el mismo. De todas maneras merece ser reconocido y es un caso único.

Más de 10 mil atletas provenientes de 204 países formaron parte de la trigésima edición de los Juegos Olímpicos (aunque cabe recordar que dos ediciones fueron suspendidas en Berlín 1916 por la Primera Guerra Mundial y en Londres 1944 por la Segunda Guerra Mundial). Londres 2012 fue un éxito a nivel organizativo y otro a nivel deportivo. Faltan casi 3 años para Río de Janeiro 2016, es mucho. Pero en el camino tendremos Mundiales y competencias importantes de todos los deportes para entretenernos. Por eso, hay que estar alerta a las nuevas figuras que surgen y se expondrán en la próxima Olimpíada. Aunque para muchos esta fue la última, todas tienen algo único. Ayer se cumplió un año del último certamen. Ya pusimos la lupa sobre él y descubrimos que es mucho más que un juego o un espectáculo, es una forma de vida. Hasta Río entonces, donde volveremos a sentir ese gusto especial de competencia. Que no nos mate la ansiedad.

sábado, 27 de julio de 2013

Mayweather vs Canelo: ¿Quién es el número uno?

El sábado 14 de septiembre, el MGM Grand de Las Vegas será el anfitrión de la pelea más importante del año. Por un lado, Floyd "Money" Mayweather. Por otro, Saúl "Canelo" Álvarez. Ambos invictos y atravesando un nivel de boxeo superlativo. ¿Quién será el número uno?


La Confederación Mundial de Boxeo decidió que el ganador de la principal contienda de la noche, se llevará un cinturón de oro puro (24 kilates). El combate será televisado por Showtime PPV (Play Per View), mientras que las entradas costarán entre mil y veinte mil dólares, según su ubicación. El peso pactado fue de 152 libras (dos menos que el límite de superwelter).

Floyd Mayweather tiene un récord absoluto de 44 peleas ganadas sobre 44 disputadas (26 fueron por nocaut). Es el mejor libra por libra del momento y fue campeón en cinco categorías distintas (último cinturón welter WBC). El estadounidense ya cumplió 36 años y en 2008 decidió retirarse de la actividad, retornando al año siguiente a la máxima competición. También fue encarcelado por violencia doméstica, en una vida cargada de sorpresa. Pero hoy, es el deportista mejor pago de todos los tiempos gracias su racha exitosa de triunfos y una enorme capacidad de marketing. La experiencia adquirida a lo largo de los años lo moldearon como un boxeador casi perfecto. Es dueño de una agilidad y velocidad increíble, pero a eso le añade una técnica estremecedora que lo hacen extremadamente efectivo. Su manera de desplazarse a lo largo del ring y una defensa muy inteligente, le permiten ser el dominador de todas sus peleas así como también saber manejar los tiempos con exactitud. Eso lo convierte, quizás, en el púgil más completo de todos los tiempos.


En cambio, el mexicano Saúl Alvarez cumplió hace unos días, 23 años. Pero a pesar de su corta edad, consiguió 42 victorias (30 por la vía del nocaut) en un total de 43 combates y solamente empató en una ocasión. Es el actual poseedor del título unificado WBC y WBA en la categoría superwelter. Se destaca por sus poderosos golpes que lo demuestran como un noqueador letal. También posee una excelente habilidad de esquivar golpes. De eso también trata el boxeo, que se define como "el arte de pegar y no dejarse pegar". Si bien su estilo menos vistoso que "Money", el mexicano se forjó en un país que ha dominado este deporte durante las últimas décadas y nació a la par de leyendas, entrenando desde pequeño. Por eso es dueño de una disciplina y categoría más que interesante. Cada día crece más y ahora buscará salir airoso en el desafío más importante de su carrera. "Canelo" es un verdadero perro de caza dentro del ring.


En la antesala de la pelea estelar, el mexicano Danny García expondrá el título mundial superligero de la CMB y de la AMB que ostenta, ante el argentino Lucas Matthysse. Otro choque impactante para una noche gloriosa de boxeo que quedará en la historia. El norteamericano de origen portorriqueño, posee un récord de 26 victorias en 26 combates (16 KO), tiene 25 años y en sus últimas peleas fue superior a rivales de enorme importancia como Erik "El Terrible" Morales, Zab Judah y el inglés (origen pakistaní) Amir Khan. Por lo contrario, el argentino viene de derrotar a Lamont Peterson y Humberto Soto, entre sus principales contrincantes, y ahora buscará dar el salto de calidad para expandir su trayectoria a nivel internacional.

Dos peleas gigantes, cuatro boxeadores de elite mundial y una noche muy especial. Todas las miradas se posarán en Las Vegas para ir develando quien es el número uno en la actualidad. No nos podemos quejar, tenemos suerte de presenciar una época más que gloriosa para el boxeo. Mientras tanto, los promotores y los aprovechadores de turno se enriquecen haciendo lo que mejor saben hacer: publicitar y vender. Nosotros solamente tenemos que dedicarnos a disfrutar.

A continuación les dejamos la promoción y presentación de las dos peleas para que disfruten.
"The One Press Opener: Who´s the one?": http://www.youtube.com/watch?v=7nKIFg_slqI

Floyd Mayweather vs Saúl Alvarez:


Danny García vs Lucas Matthysse:


jueves, 25 de julio de 2013

Ronaldinho dueño de la estrella que le faltaba

Una vez consumada la final de la Copa Libertadores de América, en Belo Horizonte, Ronaldinho se convirtió en el segundo jugador más ganador en toda la rica historia del fútbol brasilero. Solamente es superado por el ex lateral derecho Cafú, su compatriota que obtuvo el Mundial de Clubes en 2007 con el AC Milán. Este es el único trofeo que todavía no pudo obtener "Dinho", aunque peleará por él entre el 11 y el 21 de diciembre en Marruecos. En menos de 5 meses, tendrá la oportunidad de llegar a ser el más ganador de todos los tiempos. Sin embargo, deberá dejar en el camino al principal candidato: el Bayern Munich de Pep Guardiola.


Ronaldo de Assis Moreira nació en Porto Alegre el 21 de marzo de 1980. Supo ser una estrella a nivel mundial pero también tuvo que superar situaciones adversas relacionadas con las lesiones y sobre todo con las salidas nocturnas, algo muy recurrente en su vida, que provocaron un desliz en su alto rendimiento. Hoy tiene 33 años y está en boca de todos los que rodean el ambiente futbolístico. Ídolo carismático y exquisito técnicamente, con un control de la pelota pocas veces visto y una habilidad nata para ser creativo en el verde césped. También fue innovador de algunas jugadas como el látigo, la asistencia sin mirar o el pase con la espalda. Y a su vistoso estilo de juego, que enloquece a la multitud en la tribuna, le agregó constantemente lujos que fueron efectivos y no solo elegantes, como por ejemplo la vaselina o la bicicleta. Ni que hablar de su pegada, con la cual se adueñó de todas las pelotas paradas siempre, diseñando un raro efecto en la parábola de la pelota.

Ayer por la noche, tras vencer a Olimpia (de Paraguay) por definiciones desde el punto penal, Ronaldinho ingresó en el póker de futbolistas brasileros que han obtenido un Mundial con su selección, una UEFA Champions League y una Copa Libertadores. Anteriormente además del mencionado Cafú, lo habían logrado el arquero Dida y el defensor central Roque Junior. Los 4 comparten el Campeonato del Mundo de 2002, desarrollado en Corea y Japón, cuando vencieron en la final a Alemania bajo las órdenes del entrenador Luiz Felipe Scolari.

Roque Junior obtuvo en 1999 el trofeo continental americano con Palmeiras. En 2002, compartió junto a Cafú y Ronaldinho, el logro de mejor selección a nivel mundial. Dida, en cambio, tiene dos Mundiales de Clubes en el lomo: 2000 con Corinthians y 2007 con AC Milán. Además de la Champions League de ese año, consiguió otra en el 2003 con Manchester United. La Copa Libertadores la obtuvo en 1997 con el Cruzeiro y no podemos dejar afuera ni la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 ni la Copa del Mundo sub-20 en Australia 1993. Por último, Cafú es el único que tiene 3 campeonatos del mundo a nivel clubes. Con Sao Paulo obtuvo dos Copas Intercontinental consecutivas en 1992 y 1993, previo a ello obviamente obteniendo ambas Libertadores. Después también repitió los dos galardones en 2007 con el Milán italiano. El ex lateral derecho también es el único que obtuvo dos Mundiales con la selección brasilera (estuvo presente en Estados Unidos 1994). En 1997 consiguió la Copa Confederaciones y tiene en su amplio palmarés dos Copas de América: Bolivia 1997 y Paraguay 1999.

Dentro de los máximos destacados por triunfar en los certámenes más importantes a nivel continental tenemos el agrado de mencionar a tres argentinos, que si bien no lograron semejante éxito a nivel nacional, lo hicieron en sus clubes europeos y latinoamericanos. El primero fue el lateral zurdo Juan Pablo Sorín, que ganó UEFA Champions League con el Juventus de Turín entre 1995 y 1996, con muy poco rodaje en la cancha pero integrando el plantel campeón. Después participó de la recordada Copa Libertadores con River en 1996. El segundo es el caso del defensor Walter Samuel. Triunfó en la Libertadores del 2000 con un Boca magnífico que dirigía Carlos Bianchi y luego en 2010 ganó absolutamente todo junto al director técnico José Mourinho, con el Inter de Italia. Finalmente, el más reciente fue Carlos Tevez. El "Apache" fue más efectivo aún e hizo el doblete de Libertadores - Intercontintal con Boca en 2003, y Champions - Mundial de Clubes con el Manchester United inglés en 2008.

Pero los premios de Ronaldinho Gaúcho no terminan ahí. Preparen papel y lápiz para continuar analizando su extensa carrera deportiva. Con el último éxito en el Mineirao, el astro brasilero le regaló el trofeo internacional más importante a las vitrinas de Atlético Mineiro, que solamente había conseguido dos copas Conmebol en 1992 y 1997.

"Dinho" debe ser uno de los pocos privilegiados futbolistas que ganó títulos en absolutamente todos los clubes que integró y por supuesto a nivel nacional con la selección brasilera. El balance es más positivo todavía cuando se repasa la categoría de todas esos premios, en los cuales "Ronnie" siempre fue protagonista del plantel y en muchos casos capitán.

Debutó en la Primera División de Gremio a fines de 1997, año en el que se consagraría campeón del mundo sub-17 en Egipto. En el equipo de Porto Alegre, consiguió el Campeonato Gaúcho y la Copa Sul de 1999, marcando 32 goles en 82 partidos jugados. Ese mismo año fue partícipe de la Copa América en Paraguay que ganaría Brasil. Si bien aún estaba dando sus primeros pasos, Ronaldinho ya se codeaba con grandes figuras como Rivaldo, Ronaldo, Cafú, Dida y Roberto Carlos. Luego, en su fugaz paso por el París Saint Germain anotó 25 goles en 77 encuentros y conquistó la Copa Intertoto de la UEFA del 2001.

El año siguiente sería el despegue total del crack carioca. Un inolvidable Mundial de Corea y Japón 2002 le daría el galardón de integrar el mejor país del planeta fútbol. Estuvo en la terna para recibir el balón de oro, pero fue superado por sus compañeros que ya brillaban (nuevamente Rivaldo, Ronaldo y Roberto Carlos).

Tras su paso por Francia, lo fichó el Barcelona que le compró el paso a cambio 30 millones de euros. Toda su carrera en el club culé la hizo a la par del entrenador holandés Frank Rijkaard, que lo había solicitado a la dirigencia. Disputó 203 cotejos y anotó 97 tantos, uno más lindo que el otro. Ahora sí, Ronaldinho había alcanzado su máximo nivel y con ello conquistó cuanto copa pudo. Entre 2003 y 2008 logró 2 Ligas de España y 2 Supercopa de España consecutivas (ambas en 2005 y 2006). En 2006 obtuvo la famosa orejona, ya con Lionel Messi a su lado, donde marcó 7 goles y fue elegido como el mejor jugador de la UEFA Champions League. Además en el Barcelona cosechó 3 trofeos Joan Gamper, 2 Copa Cataluña y 2 trofeos Ramón de Carranza.

Como si fuera poco, en 2005 se consagró campeón de la Copa Confederaciones con Brasil, conviertiendo en 3 ocasiones y siendo figura del certamen junto al delantero goleador Adriano. Tres años más tarde, para darle un poco de variedad a sus logros nacionales e internacionales, sumó la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.

Gracias a esos magníficos años en el azul grana lo premiaron como el mejor jugador mundial de la FIFA dos veces seguidas, en 2004 y 2005. Ambos años también quedaron marcados por otro reconocimiento que le otorgó la revista inglesa "World Soccer" al mejor jugar del mundo. Para no aflojar con la racha de distinciones individuales, en 2005 ganó el muy valorado Balón de Oro que entrega la revista francesa "France Football". Para cerrar con los premios individuales en 2009 la compañía "World Champions Club" le entregó el Premio Golden Foot, al futbolista mayor de 30 años que mantiene su carrera de éxito deportivo.

Después pasó al fútbol Italiano, para sumarle a su vitrina de trofeos el Scudetto de la Serie A, a pesar de haber disputado solamente media temporada con el AC Milán hasta 2011. En el Rossonero completó 95 actuaciones, con 26 celebraciones en el Calcio.

Más adelante fue el turno de regresar a su país natal, a principios del 2011. Esta vez lo hizo en Río de Janeiro para el Flamengo, donde ganó el Campeonato Carioca, el Taca Rio y el Taca Guanabana, todos en 2011. Allí el medio campista volvió a completar otra buena performance, siempre ligado con las asistencias y las redes. Promedió 20 gritos en 49 partidos.

Ya en Atlético Mineiro, antes de su última consagración en la Libertadores, consiguió el Campeonato Mineiro 2013. Ahora solo queda una competencia por tachar, en la lista que todavía no se cansó de completar "Ronnie". En 5 meses, irá en busca de esta última copa, la del Mundial de Clubes. Primero que tendrá que sortear a algunos equipos asiáticos, oceánicos, africanos o centroamericanos. De hacerlo, se va a medir con el equipo que más elogios recibe en la actualidad: el Bayern Munich alemán dirigido desde hace poquito por Pep Guardiola.


Por ahora, Ronaldinho quiere festejar, algo que sabe hacer. No solo por esas fiestas que tanto se rumorean y que nunca podremos presenciar. Sino también la alegría, humildad y picardía que son improntas de su personalidad. Se lo nota a la hora de levantar un trofeo, o simplemente cuando festeja un gol con esa sonrisa gigante mostrando sus dientes sin pudor. Gracias a Dios, como siempre insiste, consiguió la estrella que le faltaba. Ya puede obsequiarle una camiseta de campeón más a su madre, principal coleccionista. Aplaudan de pie señores. En unos meses, estaremos haciendo fuerza para obtener una más. La última estrella de todas, porque ya no queda ninguna más, a menos que inventen torneos nuevos. Esa que obsesiona a todos, incluso a Ronaldinho, que no se cansó de ganar y ganar.

miércoles, 24 de julio de 2013

Violencia en el fútbol argentino: La sociedad barra brava

La violencia en el fútbol argentino ya se cobró en total 278 muertes en 91 años. Directa o indirectamente todas ellas están relacionadas al turbio sistema que rodea al deporte más popular en nuestro país. Durante el 2013 ya tuvimos que lamentar a 6 personas fallecidas, casi un cadáver por mes de promedio. Complicidad y negociados de los poderosos han dejado gravísimas secuelas. El principal perjudicado es el hincha común, que siempre sufre a cuestas de su amor por la camiseta. ¿Habrá alguna solución? Por lo pronto los barra bravas conviven con nosotros día a día y ya están aceptados por gran parte de la sociedad. 


La primera muerte registrada en nuestro país en un estadio de fútbol fue el 30 de julio de 1922, en la cancha de Sportivo Barracas. De todas maneras el primer caso de trascendencia pública fue el del 14 de mayo de 1939, cuando Lanús recibía a Boca en el Sur. Luis López (de 41 años) y Oscar Munitoli (de 9) fallecían tras los disparos efectuados por un policía contra la tribuna visitante para disuadir una pelea que había comenzado durante el encuentro.
 
El 23 de junio de 1968 ocurriría la peor tragedia deportiva en la historia de nuestro país. River y Boca disputaron el superclásico del fútbol argentino, pero la nota del día fue otra. Setenta y un personas murieron aplastadas y asfixiadas en la famosa Puerta 12 del Estadio Monumental. Hasta hoy inclusive, es un hecho muy confuso y oscuro, ya que hay varias teorías sobre lo que realmente pasó. Un enfrentamiento entre las dos hinchadas, la habitual represión policial o simplemente errores organizativos que causaron semejante desastre se han mencionado a lo largo de los años. La mayoría de los relatos coinciden en que la salida del público visitante se vio interrumpida por la fuerza policial y todo lo que ella implica lamentablemente. Represión. La estampida en el regreso de los hinchas hacia la tribuna para refugiarse causó que los molinetes se conviertan en una trampa mortal para todos los que, asustados, querían salir.

Al presente nos remontamos para recordar, hace muy poquito, la muerte de un hincha de Lanús en el Estadio Único de la ciudad de La Plata. Mejor utilicemos la palabra asesinato, ya que eso fue. Un video capturó el episodio cuando un policía fusiló a quemarropa a Javier Jerez que aparentemente quería disuadir y evitar la confrontación, mientras los simpatizantes granates incitaban a que la policía reaccione. Este episodio fue la gota que rebalsó el vaso para el Comité de Seguridad, que dispuso jugar las últimas dos fechas del campeonato de Primera División sin público visitante. Lo mismo contemplaba al fútbol de ascenso por supuesto, siempre azotado por experimentos de la AFA para probar que medidas funcionan y cuales no.

La última noticia provino de este fin de semana, en las cercanías del Nuevo Gasómetro. San Lorenzo debía recibir a Boca para darle fin al Torneo de Invierno, preparativo para el Inicial 2013. Pero el único fin fue el desenlace fatal de dos hombres, Marcelo Carnevale y Ángel Díaz, culpa de la feroz interna que llevan adelante la barra brava oficial del Xeneize y su par opositor. Producto de la lógica y prudencia del presidente cuervo, Matías Lammens, el encuentro se suspendió. A su vez hubo varios heridos por más de 100 disparos con armas de fuego antes de que empiece el partido AMISTOSO. La interna ya era de público conocimiento, habiéndose cruzado ambas facciones en la ruta camino a Santa Fe, el torneo pasado.

Por lo menos hubo un mínimo de coherencia por parte de la dirigencia azulgrana y no se jugaron los 90 minutos. Sino repasen la interminable lista de hechos violentos en Argentina, mientras la pelota sigue rodando. Solamente por citar un caso, nos remontamos a agosto del 2012 cuando Nueva Chicago recibió a Gimnasia de Jujuy. El partido fue solo una excusa para los de Mataderos que, acostumbrados a estar en el ojo de la tormenta, siguen inmersos en una interna de disputa política. Las dos barras principales (Los Perales y Las Antenas) fueron divididas por algo más que el poder del club. Una responde a funcionarios del PRO (dirigido por Mauricio Macri) y la otra a funcionarios K del Gobierno Nacional. En el medio, el tercer actor, la policía. Durante el aburrido empate sin goles, se produjeron gravísimos incidentes entre los 3 grupos mencionados. Una facción recibió el derecho de admisión y el siguiente paso no tardó en llegar: enfrentamiento, varios heridos por disparos de bala y ni un solo detenido. ¿Qué mejor manera de reflejar lo que vivimos hoy en día? Política, violencia y a pesar de todo, sí, fútbol.

El Estado Nacional, el Coprosede, los Gobiernos provinciales o de la Ciudad, los dirigentes de los clubes, los dirigentes de la AFA y la policía se reparten culpas sin hacerse cargo de la situación. Forman parte del sistema ya que son cómplices directos y en varias ocasiones hacen su propio negocio con las barras bravas. Claro que cada uno tiene una cuota más grande de responsabilidad que otro. Pero no hay común acuerdo, no hay trabajo colectivo, no hay decisión ni firmeza, no hay ganas. Desde ya que no las hay, porque no quieren progresar, cambiar y solucionar el enorme problema que crearon. No les conviene. Del primero al último están involucrados en el negocio, en su propio interés y beneficio.

Ricardo Casal, presidente del Coprosede y Ministro de Justicia y Seguridad Bonaerense, está a cargo no solo de la prevención y el cuidado del público en general sino también del castigo y sanción tanto hacia los clubes como a los simpatizantes violentos de éstos mismos. Su vicepresidente y mano derecha es Rubén Pérez, quien fue dos veces procesado por encubrimiento agravado. Si la cabeza no está limpia, como creen que los que trabajan para ella van a estarlo.
 
Si uno analiza como los “barras” se insertaron en la sociedad y pueden manejarse con total impunidad, hay que referirse al comienzo del problema: la relación con jugadores, dirigentes, políticos y periodistas. De ahí nacen sus negocios a través de recursos propios (trapitos de estacionamiento, ventas de bebida y comida los días de partido, reventa de entradas y venta de indumentaria, entre otros).

Ninguno de ellos sería posible sin la inacción o mejor dicho el acompañamiento de la policía, socio y cómplice directo. Se trata del factor más importante para que todo esto funcione. La policía se encarga de inculcar el pánico, de generar la violencia o de abrir la puerta a ella, justo cuando irónicamente su labor se supone es llevar el orden. Tampoco podemos dejar de lado acciones como porcentajes de pases de jugadores, viajes pagos adonde juegue el club y zonas liberadas para moverse con tranquilidad. Eso también implica a lo que ocurre con la selección nacional. Pero aquello ameritaría una investigación más profunda y concreta. A la lista de actividades debemos añadir amplia vida social en el club, participación en actos políticos, blanqueo de sueldos y puestos fijos con trabajos muchas veces inexistentes.

Javier Cantero, presidente de Independiente electo en la última elección del 2011, propulsó una lucha contra la corrupción en su club y contra los violentos que roban sin pudor plata de la institución. Además de denunciar a la conducción anterior por hechos de fraude, su mayor medida tiene que ver con el intento de erradicación a la barra brava del Rojo. Se dedicó a hablar en cuanta ocasión pudiese sobre esta problemática en nuestro país, e inclusive en un episodio se enfrentó y acusó en persona a Bebote Alvarez (líder de la barra brava del club de Avellaneda y cargo más alto de Hinchadas Unidas Argentinas).

Podemos debatir sobre si Cantero cumple un papel mediático o tiene un verdadero propósito. Quizás deberíamos señalarlo como el único dirigente en la historia que se animó a poner el pecho ante una situación de impunidad y negociados. Pero nada más. Ahí termina el asunto. Fue el único ejemplo que no continuó con el proceso del cual todos los clubes son testigo. Lo cierto es que Cantero jamás logró erradicar a la hinchada, que permaneció un par de partidos con derecho de admisión pero rápidamente volvió al ruedo. Su gestión fue pésima a nivel deportivo y una vez consumado el descenso, los violentos volvieron a dar la nota, semanas atrás, en la sede de Avellaneda. Irrumpieron en una reunión de asamblea agrediendo a la dirigencia. La imagen era impactante y producía temor. Ese seguramente había sido el propósito, dar un mensaje que llegó y fue clarísimo.

Hemos involucionado, no caben dudas. La tecnología y la democracia no hicieron efecto alguno, ni siquiera las muertes nos sirvieron de experiencia. Todos saben lo que pasa, pero nadie habla. Al que investiga, lo callan. Al que afloja, lo apretan. Al que se mete en el camino, lo liquidan.

¿Qué opciones se barajaron, con liviandad, hasta la actualidad sin ningún resultado positivo? Quita de puntos, pérdida de localía, nula asistencia de público visitante (en el ascenso viene ocurriendo hace rato en todas las categorías), partidos a puertas cerradas, refuerzos en los operativos de seguridad (cámaras y derechos de admisión), mayor cantidad de efectivos policiales, controles de alcoholemia y estupefacientes. ¿Y? Ni un solo resultado positivo. Porque en la cancha continúa presente la palabra MUERTE.

Tampoco podemos dejar de lado la falta de compromiso de muchos jueces que son encargados de causas que no son resueltas o quedan impunes. Eso impulsó a Mónica Nizzardo a fundar el 8 de septiembre de 2006, junto al ex Juez Mariano Bergés, la ONG “Salvemos al Fútbol”. Nizzardo integró la Comisión Directiva de Atlanta entre 2002 y 2005, período durante el cual además se desempeñó como encargada del Departamento de Prensa. El objetivo de esta asociación civil sin fines de lucro, no solo es apoyar a los familiares de víctimas relacionadas al fútbol sino también denunciar todos los hechos de violencia y corrupción. Durante 4 años fue presidente, con amenazas de muerte y constantes llamados intimidatorios de por medio. Pero no aguantó la insoportable situación. Las trabas en su camino fueron demasiados y el año pasado decidió no seguir más en su cargo, sucediéndola Liliana Suárez.

Sería un pecado no mencionar finalmente a la sociedad en sí, con un pedazo de responsabilidad por haberse dejado pisotear. La aceptación del sistema y de los barra bravas entre nosotros también se dieron por culpa de los aficionados comunes que permitieron semejante mal trato. Sino que alguien me explique como por ejemplo en la Sudamericana del año pasado, desde la platea más cara de la Bombonera, los socios arrojaron un cartel enorme a los jugadores de Independiente que estaban en el campo de juego. Eso también lo mamó la sociedad y de alguna manera se transformó, ya sin distinguir clases sociales. Gran parte ha aceptado y es funcional a la violencia. En estos tiempos, la sociedad se convirtió en la barra brava.

La estadística indica que 278 personas perdieron su vida por culpa de un espectáculo deportivo como es el fútbol. ¿No creen que 278, es suficiente número para poner un freno y para entender que algo anda mal? El fútbol está manchado de sangre, y eso no se borra fácilmente. A la espera seguimos que alguien tome la decisión de liderar un cambio, que por el momento, nadie quiso o se animó a hacer. ¿Cuánto tiempo de vida le quedará al fútbol argentino? Abramos paso a los optimistas, a los eternos hinchas enamorados. Tengamos la ilusión de que este deporte, pasión de multitudes, todavía se puede salvar. 

martes, 23 de julio de 2013

La rica historia del "Tata" Martino en Newell´s Old Boys

Hoy superamos los 100 "Me gusta" en nuestra página de Facebook. Les agradecemos y les dejamos de regalo un pequeño reconocimiento al director técnico argentino, Gerardo Martino, flamante entrenador del Barcelona.

El primer video es un repaso de su carrera como futbolista y como DT en Rosario, en una entrevista cortesía de "Newell´s de mi vida TV":


Mientras que en el segundo video, el "Tata" nos cuenta sobre su vida personal y su trabajo en Paraguay, filmado por LÍDERES en 2010: 

http://www.youtube.com/watch?v=V5boSZiT2vs 

domingo, 21 de julio de 2013

Goleadores en actividad que pasaron los 100 en Argentina

El fútbol argentino ha tenido grandes e históricos goleadores a lo largo de los años y todos los torneos que se han consumado. No son muchos los que han superado la barrera de los 100 goles y todavía siguen anotando en el fútbol local. Pero veamos la lista de los delanteros que se desempeñan en la actualidad. Entre ellos se destacan: Fuertes, Farías, Silvera, Silva, Luna y Sand. Todos ellos con un presente distinto, y con una trayectoria diferente a su vez. Algunos no saben que les deparará en los próximos años y otros ya planean de a poco sus últimos días de competencia oficial. Lo que si comparten en su totalidad es el olfato, la suerte, la experiencia y el oficio para gritar goles de todo tipo hasta el cansancio.

El máximo goleador en actividad es Esteban Fuertes, con un total de 221 tantos. De todas maneras, ahora no está jugando en nuestro país y se desempeña en el fútbol boliviano. En junio del 2012 el “Bichi” decidió retirarse de la máxima competición a los 39 años. Finalmente en 2013 tuvo una oferta y decidió volver a Sport Boys de Warnes, recién ascendido a la liga boliviana. Su marca de 147, lo convierte en el goleador histórico de Colón de Santa Fe y como si fuera poco es el que más partido jugó en el Sabalero (302 partidos). Allí tiene 4 “hat tricks” e hizo 13 dobletes. Además es el único futbolista que no se ha retirado y llegó a los 100 con un mismo club.

En la Primera B Nacional hay dos delanteros que también superaron la marca de las tres cifras. Ellos son Ernesto Farías (con 157) y Andrés Silvera (con 131). Si bien en la actualidad ambos se desempeñan en la segunda categoría del fútbol argentino, compartieron el paso por un grande a nivel nacional como Independiente. El “Cuqui” fue goleador del Apertura 2002 cuando se consagró campeón con el Rojo. En la actualidad forma parte del plantel de Banfield, y donde más anotó fue en San Lorenzo de Almagro. Por su parte, el “Tecla” no tuvo la misma suerte en Avellaneda (donde descendió) pero logró ser el máximo artillero de la Copa Libertadores 2006, con River. En Estudiantes de La Plata, donde es ídolo, marcó en 95 ocasiones. Tras el descenso, el futuro de Farías en Independiente es incierto y podría incorporarse en estos días a All Boys, luego del pedido de Julio César Falcioni.

El único extranjero que superó los 100 goles en el fútbol nacional es el uruguayo Santiago Silva, autor de 103 tantos. El oriundo de Montevideo, dueño de alocados festejos a la hora de celebrar un gol, llegó a las 96 anotaciones con Vélez. A pesar de su fatídico penal contra Peñarol en 2011, cuando los de Liniers no lograron llegar a la final de la Copa Libertadores, fue dos veces goleador del torneo local y figura del Fortín campeón. Hoy representa a Boca, a pesar de que no será tenido en cuenta para el próximo torneo por Carlos Bianchi. Una vez que finalice el conflicto con los Xeneizes, podría llegar a un acuerdo Estudiantes, uno de los que más se interesó.

Con 105 goles, Carlos Luna actúa en el clásico rival y es el único jugador de River que aparece en el grupo de los 100. Algo poco habitual para dos clubes que han aportado grandes artilleros a lo largo de toda su historia, los cuadros más grandes de la Argentina sin duda. El “Chino” continúa en la búsqueda de romper redes como titular del Millonario, y Ramón Díaz parece haberle dado toda la confianza para ello. De todas maneras, todavía está en deuda con la afición de Núñez.

El que cierra la privilegiada lista es el correntino José Sand, que traspasó las redes en 108 oportunidades. Supo ser el goleador histórico en las inferiores de River, donde hizo 138, pero fue superado en 2011 por el juvenil Federico Andrada. El “Pepe”, flamante refuerzo de Tigre, obtuvo durante dos torneos consecutivos el premio al que más veces anotó. El último en conseguir eso había sido el mejor jugador de todos los tiempos, Diego Armando Maradona, en 1980. Dentro de esos dos logros como máximo artillero, uno fue fundamental para que Lanús consiguiera el primer título de su historia, con Sand como delantero.


Algunos futbolistas todavía no llegaron a convertir 100 goles pero ya se encuentran muy cerca de ello y podrían hacerlo la próxima temporada. El podio de los que están próximos al centenar de anotaciones, lo completan Rubén Ramírez con 98, Ezequiel Maggiolo con 93 y el “Rolfi” Montenegro con 92. “Tito” Ramírez fue goleador en el campeonato de 2011, aunque desde entonces no tuvo grandes actuaciones. El “Lechuga” Maggiolo lleva consigo el curioso dato de haber debutado en las redes con Tigre (club que también lo vio nacer oficialmente como futbolista) y también de haber sido el último equipo con el cual convirtió. Daniel Montenegro ha forjado desde el 2000 hasta hoy una estrecha relación con Independiente. Tal es así que recientemente decidió quedarse en el club de Avellaneda, donde fue capitán el inolvidable último año, a pesar de haber descendido al Nacional B.


Vivimos en tiempos donde no abundan los goleadores, aquellos delanteros que no perdonan y son capaces de ganar un campeonato. Queda una escasa cantidad de artilleros en actividad y son muy pocos los privilegiados que han superado la barrera de los 100. Una marca anecdótica, pero que simboliza una trayectoria indiscutible de quien lo logra. Además todos los mencionados anteriormente no se encuentran pasando por un gran momento. Quizás por el paso del tiempo y su cercanía al retiro, quizás por dar paso a las nuevas promesas que nacen o quizás por los planteos tácticos y el estilo de juego actual, que no les permite relucir. 

¿Vendrán más goleadores históricos al fútbol argentino? ¿Habrán más futbolistas que ingresen en la zona de tres cifras? Los que lo lograron, supieron ser ídolos en su mayoría, porque como reza la frase: “goles son amores”. Los defensores los sufren y los directores técnicos los alaban. Por ahora, son la envidia de todos los delanteros que no llegaron a los 100 gritos.

sábado, 20 de julio de 2013

Delta Rugby Club: ¿El retorno de un grande?

 A principios del 2010 se fundó un nuevo club de rugby, Delta R.C., luego de una pelea entre jugadores y dirigentes de San Fernando. Su progreso fue sorprendente y ascendió rápidamente de forma escalonada en el torneo de la URBA. Fue un hecho sin precedentes para el rugby en nuestro país, que aún no se ha profesionalizado y sigue generando rumores sobre su futuro a diario. Por lo contrario, el presente de “Sanfer” no es el mejor y el conjunto de Zona Norte se encuentra desmembrado.


El conflicto comenzó en 2008, mientras San Fernando se consagraba campeón del Torneo de Seven. El club, social y polideportivo, tiene varias disciplinas fuertes como la náutica, el remo o el hockey (masculino y femenino). Como consecuencia de ello, algunas actividades como el rugby dependen del departamento de educación física. Los problemas no tardaron en llegar. A fin de año renunciaron varios entrenadores del equipo. En vez de que el capitán y los entrenadores sean elegidos por los jugadores (una tradición casi inquebrantable), el presidente Osvaldo Rapagna sostuvo al head coach y designó dos técnicos rentados de su gusto.

A fines del 2009 hubo una fuerte disputa entre la comisión directiva y el plantel de San Fernando ya que los jugadores querían que el deporte no sea manejado más por el presidente del club sino por la subcomisión de rugby. Varios de esos rugbiers que habían protestado por las decisiones dirigenciales fueron suspendidos para jugar, y la mayoría del plantel superior decidió formar una nueva institución.

Las principales sanciones fueron para 5 referentes del plantel (2 años sin jugar para el capitán Nicolás Lovisolo, 10 meses a Ramiro Dobal, 6 meses a Nicolás Alamo, 4 a Mariano Dobal y 3 a Mariano Sanguinetti). Las consecuencias fueron peores aún una vez que la pelea prosperó, ya que la dirigencia decidió prohibirles el ingreso al club y quitarles el carnet de socios. El resto de los implicados fueron advertidos y puestos a prueba. El quinteto fue justamente el que integró, con los mismos nombres, a los fundadores de Delta.


Empezaron todo de vuelta, literalmente de cero, nombrando como presidente a Horacio Sanguinetti (ex jugador de primera). Tras dos años de mandato asumió en su reemplazo Mario Dobal (padre de Mariano y Ramiro). El 20 de febrero debutaron en su primer partido amistoso ante Los Matreros cayendo por 46-36. Ese día tuvieron su bautismo como titulares Santiago y Jonathan Schwab, Javier Fernández, Joaquín Iezzi, Agustín Falcucci, Franciso Pascón y Maximiliano Herrera (todos ex jugadores de “Sanfer”). El resto no tenían listo el trámite de su pase todavía, pero serían en total unos 40 jugadores los que cambiarían de vereda.

Desde noviembre del 2011, el “Tricolor” hace de local en Rincón de Milberg, ubicado sobre la ruta 27 de Tigre. Allí, en la inauguración del predio, estuvo presente Julio Zamora, representando al Municipio de Tigre que ha apoyado esta iniciativa desde un primer momento. Pero antes debieron pasar por las canchas del club San Patricio y los anexos de los históricos equipos de San Isidro (CASI y SIC) para recibir a los rivales visitantes. Durante los primeros 2 años lograron integrar a 500 socios nuevos. Además el club cuenta con siete divisiones (incluyendo la Mayor) de Hockey femenino. Hasta hoy, lo único que mantuvieron intacto, aunque en distinto orden, fueron los colores en la camiseta y el escudo: blanco, verde y azul.

Al igual que otros clubes de mayor alcance, cuentan con un programa llamado “Delta Solidario” que organiza Ferias del Usado por ejemplo. A su vez ayudan a la gente carente de recursos para vivir en lugares como Villa La Angostura. También realizan colectas y trabajan en conjunto con la ONG de Rugby Solidario.

Ahora, Delta se ubica en la décimo primera posición del Grupo I (integrado por aquellos equipos que no clasifican para disputar el Top 14 y los que suben del Grupo II). Debió comenzar desde el Grupo IV como todo equipo nuevo que pasa a integrar la competencia de la Unión de Rugby de Buenos Aires. Con una rapidez increíble subió de una división a otra, y está muy cerca de formar parte de lo más alto del rugby porteño. San Fernando, por su parte, está en la Zona E perteneciente a la Reubicación del Grupo II y marcha octavo en la tabla de posiciones de esa zona.

En su doble ascenso, desde el último escalón, hay que destacar el último torneo en el cual se coronaron campeón. Delta Rugby Club consiguió el récord de 22 partidos consecutivos ganados, siendo el único equipo invicto de las 4 categorías del rugby porteño. En esa excelente y abrumadora campaña marcaron 1.297 puntos y solamente recibieron 303 tantos en contra. Los números hablan por sí solos, el desempeño grupal fue espectacular.

En septiembre del 2010, en la categoría juvenil de Menores de 16 (M-16), se produjo el primer enfrentamiento entre ambos. Delta obtuvo una victoria por 20-8 sobre San Fernando. Pero el dato a tener en cuenta fue la camaradería que demostraron tanto los menores en la cancha, como todos lo que asistieron desde afuera. En tiempos complicados y dentro de una sociedad bastante conflictiva, la actitud sirve como ejemplo. Quizás ha nacido un nuevo clásico. Los duelos sanos siempre hacen bien, sobre todo el hecho de que uno depende del otro y viceversa. Eso siempre y cuando exista el respeto, un valor que siempre mantuvo este deporte. Por suerte los problemas internos entre ambos clubes no se trasladan a la cancha y a los verdaderos protagonistas: los jugadores.


Mientras San Fernando sigue cayendo en su Grupo y continúa peleando por la Reubicación para permanecer en la división, Delta Rugby Club busca seguir creciendo día a día. No cabe duda que peleará por volver a la máxima categoría del torneo de la URBA. El tiempo le dará la razón o no, a aquél grupo de personas que decidió comenzar un nuevo proyecto. Lo cierto es que Delta abordó un sueño y con mucho sacrificio lo hizo realidad, ante dudas y prejuicios que ya se han disipado. Ahora sí, muchos aguardan el retorno de un grande al rugby argentino.

viernes, 19 de julio de 2013

René Houseman, 60 años de locura en la villa

El 19 de julio de 1953 la ciudad santiagueña de La Banda le daba la bienvenida al mundo a René Orlando Houseman. De muy pequeño tuvo que mudarse hacia Buenos Aires, más precisamente Capital Federal, donde se ubicó en una villa del Bajo Belgrano. Hasta el mismo día de hoy, el “Loco” no se despegó de aquél barrio y fue su hogar tanto en sus mejores como en sus peores momentos. La villa fue quien lo educó. Allí se formó como jugador y como persona. Mantuvo sus amistades y sus valores, con los cuales podemos estar de acuerdo o no, pero los mantuvo. A pesar de los consejos y propuestas, se rehusó a abandonar la querida villa, y todo lo que ella implicaba.


Su primer apodo, hasta que lo conocieron bien, era “Hueso”. No hace falta dar muchas explicaciones sobre el pseudónimo de un jugador de 1,65 metros de altura, con un físico casi desnutrido e inusual para el fútbol profesional. Sus piernas, bien finitas, parecían las de una gaviota. Tampoco se entrenaba como para estar firme ante las patadas que podía recibir, pero prefería esquivar. Era puro talento, de nacimiento, y tenía un fuerte rechazo hacia la responsabilidad de cuidarse. Algo obligatorio a ese nivel. Típico de crack, de distinto, pero gracias a ello muchos futuros fenómenos no llegan ni siquiera a tener un contrato en un club de fútbol.

En 1973, a pedido de César Luis Menotti, Huracán compró su pase. El barrio de Parque Patricios lo recibió con los brazos abiertos y a lo largo de su carrera no lo soltó, sino que lo ayudó mucho. La marginalidad, la pobreza y las adicciones eran todos obstáculos que Houseman debía sortear. Pero para él no era una condena, era un orgullo. Y siempre se jactó de ello, algo que en el ambiente futbolístico han valorado mucho. Tenía prohibido olvidar sus orígenes. Quizás por eso fue tan ídolo en Huracán y en todos los rincones del país.

Pero sin duda también tuvo que ver con lo que logró en el Torneo Metropolitano de 1973, el único título del Globo en la era profesional. Ahora junto a figuras como Miguel Brindisi, Carlos Babington, Alfio Basile y Omar Larrosa tenían un verdadero desafío. Y la alegría no tardó en llegar. Tampoco la idolatría por parte de los hinchas “quemeros”. Los privilegiados de la época pudieron disfrutar de la picardía y la gambeta en su máximo esplendor. Resulta fácil describir el estilo de juego del “Loco”. Tenía todo. Velocidad y aceleración en el pique corto o largo, rapidez mental, jugaba con las dos piernas por igual y tenía una agilidad increíble para esquivar a todos los rivales. En la vida era igual. Sencillo, sincero, incontrolable e inmodificable. Por eso lo querían tal cual era y fue hasta el día de hoy.

Vladislao Cap, que estaba cubriendo el puesto de entrenador de Enrique Omar Sívori, lo citó al Mundial de Alemania en 1974. En la primera fase anotó un verdadero golazo contra Italia y luego otro repitió contra Haití. En la segunda fase del torneo marcó ante los locales. En la próxima Copa del Mundo lo volvió a convocar César Luis Menotti, quién ya lo había dirigido en Huracán. Convirtió un tanto en la histórica goleada contra Perú por 6 a 1 y fue partícipe del primer campeonato mundial obtenido por Argentina, justamente en nuestro país. Su pequeño reconocimiento fue haber ingresado en la final contra los holandeses, para llevarse su ovación propia de recuerdo.

El rey de las artimañas a la hora de desmarcarse. No lo podían agarrar, ni siquiera lo alcanzaban para pegarle. Parecía frágil como un cristal, pero tenía una fuerza interior bestial cada vez que encaraba. A lo largo de su carrera se desempeñó como “wing” o extremo derecho. Houseman no corría, volaba. ¿Hace cuánto no vemos un jugador con semejantes características y en esa posición? Pareciera que hace una eternidad ese puesto dejó de ser funcional para los esquemas tácticos y no volvió a existir otro “atrevido” en el fútbol argentino que se anime a inventar. El se movía hasta la mismísima línea de cal, jugaba como lo hacía en su vida real, al límite.


Se retiró en 1985 en Excursionistas, su segunda casa, como él mismo confiesa constantemente. Aquél equipo del Bajo Belgrano que lo había rechazado cuando fue a probarse de chiquito, por su clase social baja y la situación precaria en la que se encontraba. La misma institución que en la actualidad apodan “Los Villeros”. Como son las vueltas de la vida para René, que había sido rechazado justamente por su condición de “villero”. Por eso tuvo que cruzar a la vereda de enfrente, Defensores de Belgrano, donde sí lo aceptaron. Entonces debutó en primera división para el clásico rival donde convirtió 16 goles, en cantidad doble de partidos jugados. Así y todo forjó una relación de amor eterno con Excursionistas, donde hoy se desempeña como coordinador del fútbol femenino y en donde asiste a todos los partidos del Verde desde la platea. Pero su fanatismo va más allá de eso. Es el dueño del barrio. No hay persona que no lo cruce en las calles del Bajo (su tercera casa), y lo salude afectuosamente.

Entre 1981 y 1984 pasó por Colo Colo de Chile, Amazulu de Sudáfrica y dos grandes del fútbol argentino como River e Independiente, donde no pudo redondear una actuación regular. Durante esos años, Houseman bajó el excelente rendimiento con el que tenía a todos acostumbrados y solamente anotó 3 goles oficiales. Nadie puede saber que hubiera sucedido si su enfermedad no hubiera estado tan latente en cada día de la semana, en cada entrenamiento o en cada partido. A pesar de la adicción al alcohol, el “Hueso” rendía y rendía bien, sacaba diferencias físicas en el campo de juego. Siempre peleado con los entrenamientos y concentraciones pero muy compinche de la pelota. Y sobre todo con la filosofía inquebrantable de tratarla bien. Aunque lamentablemente, el alcohol lo acompañó a todos lados.

Consulten sino a uno de los mejores arqueros de la historia, Ubaldo Matildo Fillol, quien lo supo sufrir atajando para River en el Metropolitano de 1977. El día anterior al encuentro René se escapó de la concentración de Huracán para asistir a un cumpleaños. Regresó a las 11 de la mañana, a poco tiempo del comienzo, completamente alcoholizado. Para resumir aquél empate 1 a 1 entre el Globo y el Millonario, cerca del final el "Loco" convirtió un gol dejando ridiculizado al enorme defensor central Roberto Perfumo y definiendo ante el “Pato” Fillol. Tras el gol, pidió el cambio (acusando una falsa lesión) y se retiró directamente hacia su hogar para dormir.

En 2011, su querido Huracán y su amado Excursionistas chocaron por la Copa Argentina, en Catamarca. Ambas dirigencias acordaron entregar la Copa René Orlando Houseman al ganador del pasaje a los dieciseisavos de final. Finalmente el club que milita en la Primera C del fútbol argentino se llevó el trofeo y el “Hueso” no pudo disimular su felicidad festejando alocadamente con los jugadores. Después pidió disculpas públicamente, como si le debiera algo a alguien. La verdad es que a nadie debería importarle, porque todo lo que tenía que demostrar lo hizo en la cancha.

Houseman llega hoy a las seis décadas de vida. Nadie lo puede discutir, es un loco, pero uno de esos que se merecen el mote de “loco lindo”. Aprendamos a disfrutarlo en vez de cuestionar su forma de vivir. Ahora, llenarse la boca con críticas no tiene sentido. Lo cierto es que ante la adversidad, triunfó, y vaya que lo hizo. Nos quedan miles de anécdotas que nos podrían hacer reír y también llorar. Pasaron 60 años de locura en la villa, que hayan muchos más.